El costal en la Semana Santa Zaragoza 2025

La Semana Santa de Zaragoza 2025 mantiene viva una tradición que, aunque minoritaria en la ciudad, gana cada vez más protagonismo. Se trata de los pasos portados a costal, un sistema de carga que exige preparación física y coordinación. Este estilo, con raíces en la Semana Santa andaluza, se ha integrado en Zaragoza sin perder la esencia propia de la tradición aragonesa, caracterizada por el sonido de tambores y bombos.
Como características del costal, a diferencia de los pasos llevados a hombros con horquillas, los costaleros soportan el peso sobre la nuca y los hombros, protegidos por un costal acolchado. Avanzan bajo la estructura del paso, siguiendo las órdenes del capataz, quien marca el ritmo con un llamador.
Cofradías con pasos a costal en Zaragoza
La Agrupación Parroquial del Santísimo Cristo del Amor y Buen Fin y María Santísima de la Esperanza Trinitaria es una de las que procesionan con pasos a costal en Zaragoza. Aunque no tiene la categoría de cofradía penitencial de pleno derecho, destaca por la calidad artística de sus imágenes y el simbolismo de sus procesiones. Sus dos pasos, el Santísimo Cristo del Amor y Buen Fin, obra de José Antonio Navarro Arteaga, y María Santísima de la Esperanza de la Trinidad, forman parte del Vía Crucis que se celebra el Viernes de Dolores, el 11 de abril de 2025. El recorrido parte de la Parroquia de San Valero, en el barrio de Las Delicias, pasando por calles como Graus y Bolivia.
Otra de las hermandades que han consolidado el uso del costal en la Semana Santa Zaragoza 2025 es la Hermandad de Jesús de la Humildad Entregado por el Sanedrín. Fundada en 1981, ha mantenido esta forma de portar los pasos en sus procesiones del Domingo de Ramos y del Miércoles Santo. Su paso principal, Nuestro Señor Jesús de la Humildad Entregado por el Sanedrín, fue esculpido por Francisco Berlanga en 1994 y representa a Jesús ante el tribunal judío. La estructura del paso, decorada con cartelas policromadas de Víctor Carazo y faroles neobarrocos, es sostenida por 35 costaleros organizados en ocho trabajaderas. Junto a esta imagen, también procesiona María Santísima del Dulce Nombre, una talla bajo palio con bambalinas bordadas y faroles plateados, portada por 29 costaleros distribuidos en seis trabajaderas.
La Cofradía de la Institución de la Sagrada Eucaristía fue la primera en introducir en Zaragoza un paso a costal, en 1991. En la actualidad, mantiene esta tradición con dos imágenes que desfilan en Martes y Jueves Santo. El Cristo del Amor Fraterno, esculpido por Antonio Labaña, representa a Jesús bendiciendo el pan en la Última Cena. Su estructura, de estilo barroco, está iluminada por faroles plateados y cirios morados y es cargada por 30 costaleros. Además, el Misterio de la Santa Cena, obra de José Antonio Navarro Arteaga, representa el momento en que Jesús consagra el vino rodeado por los doce apóstoles. Este paso, de 1.400 kilos de peso, cuenta con dos cuerpos de caoba barnizada y respiradero dorado y es portado por 45 costaleros.
El esfuerzo de los costaleros y la singularidad del costal en Zaragoza
La carga a costal implica una gran exigencia física. Los costaleros deben ensayar durante semanas para coordinar sus movimientos y distribuir el peso de manera equilibrada. En cofradías como la de la Eucaristía, estos entrenamientos resultan esenciales para lograr que el paso avance con un ritmo constante y sin alteraciones. Frente a otros métodos de carga, el costal introduce un mayor componente de esfuerzo penitencial. Mientras que los varaleros sostienen el paso con varas visibles y los pasos sobre ruedas permiten desplazamientos más fluidos, los costaleros permanecen ocultos bajo la estructura, realizando un trabajo anónimo que requiere resistencia y precisión.
Este sistema, aunque menos frecuente en Zaragoza que en otras ciudades españolas, ha ido adquiriendo un peso relevante en los últimos años. Su evolución ha ido de la mano de innovaciones en la imaginería y en la estética de los pasos. Escultores como Navarro Arteaga y Francisco Berlanga han sido fundamentales en este proceso, con tallas de marcado estilo barroco y neobarroco que han elevado el nivel artístico de la Semana Santa zaragozana.
La importancia del costal en la Semana Santa Zaragoza 2025
El calendario de la Semana Santa de Zaragoza 2025 incluye varias fechas en las que los pasos a costal tendrán un protagonismo especial. El Viernes de Dolores, la Agrupación Parroquial del Cristo del Amor y Buen Fin recorrerá las calles de Las Delicias con su tradicional Vía Crucis. El Domingo de Ramos, la Hermandad de la Humildad celebrará su Estación de Penitencia con sus dos pasos. En Martes Santo, la Cofradía de la Eucaristía sacará en procesión el Cristo del Amor Fraterno, mientras que el Miércoles Santo será el turno de la Humildad en su Estación de Penitencia. Finalmente, el Jueves Santo, la Cofradía de la Eucaristía realizará su procesión titular con ambos pasos a costal.
La presencia del costal en la Semana Santa Zaragoza 2025 no solo supone un reto físico para los costaleros, sino que también representa una forma de devoción que ha sabido integrarse en la tradición local. Desde la introducción de los primeros pasos a costal en 1991, este método ha evolucionado con la incorporación de palios y estructuras de mayor complejidad. La combinación entre esfuerzo, arte y solemnidad ha permitido que esta forma de procesionar se afiance en Zaragoza, adaptándose a la identidad de su Semana Santa sin perder el sentido penitencial que la caracteriza.