La imagen de la Virgen de los Dolores de la Hermandad de San Joaquín y de la Virgen de los Dolores estrenará una nueva diadema de camarín en la Semana Santa de Zaragoza 2016, realizada por el artesano zaragozano Fernando Ortiz de Lanzagorta y Vivet. Ésta nueva diadema se bendijo e impuso a la imagen de la virgen el pasado mes de noviembre.
La nueva diadema de la Virgen de los Dolores se trata de una pieza en plata en su color, cuyo diseño inicial sufrió variaciones puesto que originariamente se pensó en una cama de haces de luz, pero conforme avanzaba el trabajo de la obra se descartaron con el objetivo de dar más protagonismo a los elementos que componen el perímetro. En el perímetro interior se asientan piedras granates en una sucesión de blasones y diseños tardorrenacentistas en forma de C. En el perímetro exterior de la pieza se pueden observar siete cuarterones y unas escenas naturalistas que nos presentan episodios de la vida de María representados por unas tórtolas (cada uno de los grupos es distinto), que a su vez simbolizan al patrono de la Hermandad, San Joaquín, quien es frecuentemente representado en el arte con unas tórtolas a modo de ofrenda. En cada cuarterón se aprecia una perla australiana: las siete evocan los siete Dolores que Nuestra Madre sufrió y son razón del nombre actual de la Hermandad.
Conserva una línea análoga en su estilo y tomando formas del paso que sustenta a la Virgen de los Dolores en sus salidas procesionales. En su confección, totalmente artesanal, se conjugan todos los trabajos del oficio de platero: el metal por chapa, el estirado, el repujado, fundición, repasado a buril, terminación de diferentes procesos de limado y lijado con terminación de fases de pulido al Rouge Français.